La artista venezolana Renata Fernández estará presentando en el Museo Alejandro Otero de la ciudad de Caracas, un notable compendio de su obra más reciente, bajo el título “Trópico Camuflado”. A partir del 13 de Octubre y hasta el mes de enero del año entrante, podrán ser apreciadas 14 obras –pinturas, esculturas y dibujos– de pequeño y gran formato, que incluyen una extraordinaria y llamativa intervención de la fachada del museo con un mural de grandilocuente altura e impactante belleza.
“Trópico Camuflado”, la primera exhibición individual de Renata Fernández en Venezuela, constituye la feliz consumación de un momento de madurez artística en la carrera de esta artista de talla internacional, que vale la pena presenciar desde cerca. Esta exposición resume el trabajo de diez años de quehacer artístico indetenible y en relación a su pasión por la creación la artista comenta: “Yo no me permito bloqueos creativos. No detengo jamás el curso de mi producción plástica bajo ningún pretexto. Ese es el único reglamento que le impongo a mi proceso creador. Del hacer es de donde provienen las soluciones y es en el hacer donde surgen las ideas. Esta exhibición es muy importante en mi carrera porque mi obra ha alcanzado un estadio muy sólido considerando la compleja cronología de procesos que la han desencadenado”.
La artista plástica venezolana Renata Fernández ha logrado con talento y tenacidad exhibir su trabajo en el Reino Unido, Bélgica, España y otros países de Europa; y desarrollar a lo largo de la última década de vida en el exterior un trabajo plástico multidisciplinario, consistente y relevante. Después de dos años intentando abrir espacio en su comprometida agenda para responder a la invitación del Museo Alejandro Otero, Renata trae finalmente a Caracas “Trópico Camuflado” y de este modo celebra en grande su reencuentro con su ciudad natal.
“Trópico Camuflado” cuenta con la curaduría y producción del joven emprendedor de las artes internacionales, y conductor de la organización MAS CIVILES –encargada de la realización de la exhibición-, Manuel Sanmartín. A su vez, gracias al importante respaldo financiero de Iberoamericana de Seguros, el mural de grandes proporciones que embellecerá la fachada del museo –de dimensiones sin precedentes en el país- será felizmente desplegado. Fuera y dentro del museo, plantas de grandes dimensiones dibujadas, pintadas o esculpidas por Renata, expandirán toda su grandeza para recordarnos la agridulce voracidad con la que la vegetación tropical envuelve a los habitantes de sus paisajes, y gracias al catálogo desplegable que dará apoyo y perdurabilidad a la exhibición –cortesía de la compañía española ARTELISTA- el público en general tendrá la oportunidad de llevarse a casa una réplica de las obras que le darán al Museo Alejandro Otero la mejor cara de su historia.
En palabras de la artista: “La obra de esta exhibición se origina hace diez años con una imagen de un soldado británico, en los primeros días de la invasión a Iraq, que vi al revés. Dibujé esa imagen invertida que parecía una cruz por casi un año, y luego comencé a tropezarme con otras imagines de otros conflictos bélicos que incorporé también a mi obra en desarrollo. Posteriormente, empecé detenerme en el camuflaje, el paisaje con el que los soldados se visten, que es efectivamente, una noción muy pictórica en sí misma. Eso a su vez derivó en un renovado interés por el paisaje, interés poco frecuente en mi obra hasta ese momento, y coincidió con viajes a Venezuela en los que empecé a detenerme en la diversidad de la vegetación que en el país tenemos, comparado con paisajes completamente intervenidos por el hombre como los de Gran Bretaña. Empecé entonces a dibujar plantas monstruosas y a mezclar mi interés por el camuflaje con cierta insistente atracción hacia estas matas que tenemos en el trópico y que usamos para adornar, para crear volúmenes, aunque ellas en el fondo están constantemente amenazándonos con apoderarse de todo, con extenderse, con desplazarnos”.
Es como resultado de una compleja concatenación de influencias e inspiraciones que surgen las pinturas, esculturas y dibujos que dan cuerpo y sentido a la exhibición individual de Renata Fernández en Caracas. Sin la artista haberlo planeado de modo consiente, “Trópico Camuflado” es una metáfora de la realidad actual venezolana, en la que, como bien lo destaca ella misma, “elementos con los que pensamos estar muy familiarizados se transforman en factores de riesgo, inestabilidad, incertidumbre”. Por otra parte, acota: “visitar esta exposición ofrece a los ciudadanos venezolanos la oportunidad de retomar los espacios que por naturaleza pertenecen al performance artístico”. Los museos son del arte y para ratificarlo, Renata Fernández lleva al museo Alejandro Otero su obra y nos invita a todos los venezolanos a ser parte de su fabuloso compromiso con el hacer plástico contemporáneo.
“Trópico Camuflado” es una exhibición por y para la ciudad. Un regalo para el transeúnte desprevenido, para el espectador entendido, y para la familia venezolana en general.
Iberoamericana de Seguros, MAS CIVILES, ARTELISTA (España) y Árbol Estudio son los patrocinadores principales de la exposición “Trópico Camuflado” de Renata Fernández en el Museo Alejandro Otero.
Más información: "Trópico Camuflado"
