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Efectivamente, academia Laocoonte ...
..., donde el dibujador conoció y se dejó enseñar por dos maestros : Juan Miguel Palacios y "El Cherra" (Espero que no se molesten si los cito).
Un humildísimo primer piso, un entarimado crujiente (aunque no como los croissants) ...
... algún alumno aventajado (he olvidado su nombre también, pero imposible olvidar que era doblemente pintor : por el día, pintor de brocha gorda : pisos, despachos, - gotelé y tal, ya saben- ; por la noche, pintor de brocha fina). ¡Y bien fino que era el chaval. ¡Ah, sí, acabo de caer!, le llamábamos "Peto" (un "alias", supongo). ¡Bueno, "Peto", un saludo, por donde andes.
Luego el viejo modelo, un Baco redivivo y un poco cascado, de milagrosos rizos, (el pelo de su cabellera se había quedado con él para siempre).
Luego ese otro;¿cómo se llamaba? ... Ah sí, ahora me sale, de carrerilla : Artemio Telón Caño, anticuario.
Luego la chica aquella de los ojos color miel ... ... ..
Luego, ...; pero mejor seguimos otro día, éramos un ramillete
La academia ..., que ya no está ahí (¿no aprecian Uds. el cartelito de "SE ALQUILA"?) Ni sé siquiera si sigue en alguna otra parte de la ciudad.
En fin, creo que a todo esto le pega meter aquí una estrofa de La Bohème, esa bella canción de Aznavour ...
Quand au hasard des jours,
Je m´en vais faire un tour,
A mon ancienne adresse,
Je ne reconnais plus,
Ni les murs, ni les rues,
Qu´y ont vus ma jeunesse,
En haut d´un escalier,
Je cherche l´atelier
dont plus rien ne subsiste,
Dans son nouveau décor,
Montmartre/La Latina semble triste,
El les lilas sont morts.
Las lilas de Montmartre quizás estén muertas, pero aquí los geranios no (enfrente de la academia hay una floristería, no hablo por hablar).
No, esto no era el monte parisino, ni quedaba cerca el Sena, pero sí el Manzanares. Que ahora tiene patos; aunque no "bateaux-mouches", esa es la verdad. Claro que; ¡uy, pero que tarde se está haciendo. Ya seguimos otro día, ¿vale?
... ... ...
La bohème, la bohème,
on était jeunes,
on était fous,
La bohème, la bohème ... ... ...
Llevo impresa la luz fría de una mañana de marzo en la alta tierra castellana. He aquí una manera adecuada para un artista de decir que nací en un pueblo soriano, hace ya, ¡ uy, bastantes años !
Sin embargo, es poco lo que permanecí allí y los avatares de la vida me han depositado en Madrid, de donde también soy y ya para siempre.
No tengo formación especial, o mejor dicho, académicamente seguida. Unas temporadas con un pintor madrileño, un paso por la Escuela de dibujo ...
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