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Vivimos a un ritmo de vida bastante rápido, la ley del más fuerte se hace presente día con día en búsqueda de nuestro ideal de vida.
El tiempo se vuelve un factor importante y nuestros pensamientos toman un papel primordial en el proceso de conseguir ese ideal, por lo que estos constantemente se ven distraídos de la majestuosidad que nos brinda el universo donde nos encontramos.
Pareciera que nos da más satisfacción recibir un like, que el cantar de las aves recibiendo con euforia los primeros rayos del sol. Parámetros sociales y culturales nos dictan las cosas a las que les "debemos" invertir nuestra atención y energía .
Nos olvidamos de las cosas simples y perfectas que nos forman y nos rodean, de la perfecta función de cada átomo que construye la totalidad de nuestra tangible realidad.
El universo nos brinda una evidencia clara de la perfección natural ante todo lo que existe, cada partícula cumple su función intuitivamente, desarrollando en conjunto una basta diversidad de formas de vida, estados de la materia, reacciones químicas , hasta complejos sistemas de auto-conciencia como lo somos nosotros. A pesar de eso, seguimos siendo un punto casi invisible en el plano cósmico, distancias que se miden en años luz y albergan inmensos cuerpos que fluyen en una impecable magnética.
Millones de años han estado fluyendo en sinergia y hasta ahora no hemos sido capaces de comprender su origen y su sentido exacto , no obstante seguimos siendo parte de esa frecuencia.
Nuestro ritmo de vida es rápido pero el universo ya nos lleva ventaja, cada vez resulta más loable la idea de que en algún punto existe una especie de vida con gran similitud a la nuestra.
Dentro de una creación de energía perfecta (Cosmos) no nos deberían de sorprender muchas cosas, sin embargo nuestro instinto Terrenal nos hace voltear hacia arriba y sólo observar las nubes, Como quien cree que lo sabe todo y se ciega a la conciencia evolutiva.
Todos los días seamos conscientes o no, somos parte de esta sinergia perfecta, porque venimos de ella. Apreciarla y comprenderla es un gusto y responsabilidad individual, la mente es tan inmensa como una supernova y el cielo no es un límite, sólo es una vista que disfrutar para trascender a nuevos niveles de consciencia .
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