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Sansón era un israelita famoso por su fuerza. Llegado su momento Yavhé quiso que acaudillara a su pueblo, cosa que hizo por 20 años. Pero lo mismo que tenía un fuerza descomunal era presuntuoso. Por eso quizá quiso Yavhé que al final lo venciera una "debil" mujer; una filistea por más señas , de nombre Dalila. ¡Ah, qué historia esta ! ¿eh? Sansón le dijo, tras mucho insistir ella, dónde radicaba la razón de su fuerza. "En el pelo", le confesó. Como Sansón estaba colado por Dalila de esta manera quedó en sus manos. Manos laboriosas que en una noche en que Sansón dormía profundamente le dejaron la cabeza como una bola de billar. Al despertar Sansón era como un bebé en brazos de la filistea.---
Y a partir de ese momento fue como si todas las legendarias hazañas de Sansón no hubieran servido para nada. Pues, ¿de qué le sirvió haber escapado en una ocasión de Gaza, donde lo habían encerrado sus enemigos los filisteos arrancando las puertas de la ciudad ? Puertas que a continuación se echó a la espalda y, riendose de sus enemigos, abandonó en lo alto de un monte, para fastidiar aún más ¿ De qué le sirvió matar en otra ocasión en que le enfadaron a mil de sus enemigos armado tan solo con una quijada de burro ? ¿Y qué me dicen de aquella vez en que capturó trescientas zorras, las ató por el rabo y a cada par a su vez una tea ardiendo y las soltó por los campos donde los filisteos estaba a punto de recoger la cosecha ? Los campos ardieron y los filisteos se quedaron sin cosecha y rabiando.---Es natural pues que los filisteos se la tuvieran jurada, aunque no sabían cómo meterle mano. Se habían dado cuenta de que por la fuerza no lograrían nada; y fue entonces, cuando más desesperados estaban, que surgió Dalila. Y a partir de aquí ya todo fué como la seda.---El caso es que una vez perdido su pelo, y por tanto su fuerza, los filisteos le sacaron los ojos, y para burlarse de él lo pusieron a moler trigo en un molino movido por un asno. Aunque uno piensa que ya le debía estar saliendo algo de pelo a Sansón porque, si no ¿cómo iba a ser capaz de mover semejante pedrusco?---Para Sansón toda aquella calamidad fue como una interminable penitencia. Hasta que un día los filisteos, que iban a celebrar una fiesta en un templo, dedicado a su dios Baal, Sansón tuvo ocasión de resarcirse. Se querían burlar una vez más de Sansón, para lo cual lo llevaron al templo, donde exhibirlo y que todos se pudieran reir de él. Pero a Sansón, SÓLO le habían despojado de su pelo, ¡no se había quedado calvo! Y en un día como aquél igual le había salido ya un poco. El caso es que pidió que lo colocaran entre dos columnas, "porque estaba tan débil que no se tenía en pie", había dicho el muy listo. Y entonces, cuando los filisteos estaban en lo mejor del jolgorio, se puso a empujar las columnas, hasta que éstas cedieron y el templo se vino abajo, matando a la mayoría de los asistentes. Con ello Sansón infligió a los filisteos la mayor de sus derrotas, pero no vivió para contarlo, porque el también pereció.
Llevo impresa la luz fría de una mañana de marzo en la alta tierra castellana. He aquí una manera adecuada para un artista de decir que nací en un pueblo soriano, hace ya, ¡ uy, bastantes años !
Sin embargo, es poco lo que permanecí allí y los avatares de la vida me han depositado en Madrid, de donde también soy y ya para siempre.
No tengo formación especial, o mejor dicho, académicamente seguida. Unas temporadas con un pintor madrileño, un paso por la Escuela de dibujo ...
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