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Lápiz,tinta china y prismacolor s/papel
43.5 x 34 cms
2008
Un boceto que realicé para la serie La mañana de ayer.Quise que quedara con los orificios del cuaderno de dibujo,porque representa a una niña.Toda esta serie representa a una niña,entonces,el cuaderno me da la sensación de los dibujos infantiles,tan espontáneos y expresivos.
El color sólo en la cabeza de la niña es un símbolo de la manera en cómo murio Vero.Elegí este modelo,porque me cautivó la mano que tiene en la boca;es como si ella quisiera decir algo pero se lo calla.Y así fue la vida de Vero,ella debía decir muchas cosas sobre su mundo interno pero,finalmente,siempre se reprimía...A veces,cuando salgo a caminar en las mañanas frescas y soleadas,cuando escucho el canto de los pájaros y veo el verde de los prados por donde camino me pregunto:Si Verónica no se hubiera reprimido tantas cosas y malestares internas...¿estaría viva? Sigo mi caminar porque de nada sirve machacarse la cabeza con preguntas insolubles y fuera de tiempo.
En la parte inferior escribí la frase What a wonderful world,y después la intenté borrar,entonces quedó rasgada y afectada.Bueno,como es el mundo,maravilloso por sí mismo,pero lo rasgamos y lo afectamos con nuestras nimiedades y nuestros egoísmos ,tanto así,que está tan deteriorado y tan gastado,que el hecho de que una jovencita haya amanecido muerta,con una manguera enrollada en su cuello a los 26 años de edad,la sociedad lo asume como algo cotidiano...Para mí no fue así.Su recuerdo,su risa,su voz y sus palabras,se quedarán tatuadas en mi alma hasta que me muera.
Nací en la ciudad de México.Estudié en varios lados como el CEA y la ENAP,pero siempre he dicho que más que escuela,yo tuve maestros.Y estos son mis tres maestros a quienes debo todo en la pintura:Rosario Durán,Javier Anzures y Edgardo Kerlegand.
Desde mis inicios,hace trece años,la figura humana es la temática principal en mi obra.Añado algunos elementos por el valor plástico que les confiero.Me gusta trabajar con temáticas sórdidas y tristes,pero también la alegría y la felicidad...
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Críticas (1)
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