El cine, desde sus orígenes, adaptó obras literarias, teatrales y, también, pictóricas. Encontró en los cuadros clásicos imágenes para convertir en movimiento. El séptimo arte sigue buscando la inspiración entre pinceladas y no duda en transformar lienzos en escenas fílmicas. Seleccionamos cinco ejemplos.

Una partida de campo (1936, Jean Renoir)
La pintura impresionista de Pierre Auguste Renoir aparece en cada fotograma de Una partida de campo. El director francés rinde homenaje a la obra de su padre a través de bellas secuencias sumidas en la naturaleza impresionista. Basada en el texto de Guy Maupassant, el mediometraje narra la excursión de una familia parisina a los márgenes del río Sena, alterada por el encuentro con dos jóvenes muy pícaros. Los cuadros de Auguste Renoir se concretan en varios momentos de la película. Aunque el filme está impregnado, de principio a fin, del impresionismo que bañó las orillas del Sena.

El columpio. 1876. Pierre Auguste Renoir

El columpio. 1876. Pierre Auguste Renoir

La joven de la perla (2003, Peter Webber)
Peter Webber recrea en la cinta La joven de la perla el universo pictórico de Johannes Vermeer. Griet se incorpora a la vida del arruinado artista holandés como sirvienta para ser, finalmente, su inspiración. El título del filme alude a uno de los cuadros más emblemáticos de Vermeer y su creación ocupa el nudo de la historia. De la relación que surge entre el pintor y la joven nacerán algunas de sus obras, como Mujer con una jarra de agua (hacia 1662), para culminar con el lienzo protagonista de la película, La joven de la perla (hacia 1665).

Mujer con una jarra de agua. Hacia 1662. Johannes Vermeer

Mujer con una jarra de agua. Hacia 1662. Johannes Vermeer

La ronda de noche (2007, Peter Greenaway)
Ámsterdam, año 1642. El famoso pintor holandés Rembrandt acepta el encargo de la que será su obra maestra, La ronda de noche. Al descubrir la conspiración de un asesinato, se propone denunciar y acusar a los culpables en su pintura. No obstante, los acusados planean una venganza para arruinar al artista. El cineasta, Peter Greenaway, representa la escena del lienzo en el escenario de la cinta, del mismo nombre, La ronda de noche. Ejecutando un retrato del recorrido que trazó Rembrandt desde la gloria hasta el fracaso.

La ronda de noche . 1642. Rembrandt

La ronda de noche . 1642. Rembrandt

Melancolía (2011, Lars von Trier)
Melancolía es un relato apocalíptico. Mezcla el fin de la Tierra, amenazada por la inminente colisión contra otro planeta, y los mundos antagónicos de dos hermanas, Justine y Claire. Lars von Trier exprime su particular lenguaje cinematográfico y acude a referencias artísticas para que crear escenas alegóricas. Bajo este enfoque, se reproduce el cuadro de Ofelia (hacia 1851), de John Everett Millais, cuando Justine intenta escapar de la opresión existencial y se sumerge, vestida de novia, en el río.

Ofelia. Hacia 1851. John Everett Millais

Ofelia. Hacia 1851. John Everett Millais

El molino y la cruz (2011, Lech Majewski)
Catorce años de trabajo asegura el director polaco que invirtió para transformar en película el lienzo Camino del calvario (1564) de Pieter Brueghel. El filme cuenta la Pasión de Cristo ambientada en Flandes, bajo la ocupación española, en 1564. El espectador asiste al proceso de creación de la pintura, mientras Brueghel pone voz a la tragedia que se está viviendo. Lo hace a través de doce personajes del cuadro que cobran vida en la imaginación del pintor flamenco. Dentro de un espectacular paisaje panorámico, en el que aldeanos y jinetes de capa roja se mueven condicionados por las aspas del molino.

Camino del calvario. Hacia 1564. Pieter Brueghel

Camino del calvario. Hacia 1564. Pieter Brueghel