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Naciste un "Domingo"... por siempre fuiste del Señor;
alegraste a tus padres: Carlos y Brígida. TE decían: "Mínot".
Tu nacimiento fue un gran gozo, una gran ilusión
un niño hermoso... con un noble corazón.
Ibas creciendo en plena obediencia,
ibas amando a tus padres y cuidando a tus hermanitos.
Tú tenías la clara conciencia de que cada persona es bueno,
un ser maravilloso; de Dios los ojitos.
A los siete años hiciste la Primera Comunión
y sentiste ese día una alegría maravillosa.
"Tener a Jesús dentro -dijiste-; ya no deseo otra cosa".
Recuerdo esos propósitos que con alegría hiciste:
-confesarte con mucha frecuencia,
-deseabas los domingos santificar,
-tus mejores amigos: Jesús y María
y dijiste: -"Prefiero morir antes que pecar".
A los 12 años a don Bosco conociste.
Te ofreciste como paño para hacer un traje al Señor
y deseaste tanto, tanto, tanto... hacerte santo
que sólo a Dios le entregaste el corazón.
Abandonaste el Oratorio por inflamación en los pulmones...
de regreso a casita, de regreso a Mondonio
¡Esto no es un invento! Allí recibiste los últimos sacramentos.
Viste el cielo abierto; tú no deseabas otra cosa...
tus últimas palabras:
"Estoy viendo cosas maravillosas".
(Poeta anonimus).
Obra: DOMINGO LOS HACE SAVIOS
Serie: Creencias del Alma
Técnica: Plumones y Colores
Autoría: #YarimeLobo
Año de Inspiración: 2009