Inicio > Obras de arte > Net Art/Arte digital > Antonio Francesco Migliori Ceffalo > Efigie de la diosa griega Baubo en un desierto con orquideas antropomorfas

LocalizaciónPerú

Efigie de la diosa griega Baubo en un desierto con orquideas antropomorfas

Ampliar

Información de la obra original

© Todos los derechos reservados

Descripción de la obra

Baubo, una diosa menor de la antigua Grecia, la llamada “diosa de la obscenidad”. En la mitología griega, Baubo es una mítica mujer reconocida como una especie de mujer, al parecer prvenía de Eleusis, a la que Hesiquio llama niñera de Deméter, si bien la historia más común es como sigue: en su deambular buscando a su hija, Deméter se encontró con Baubo, quien la recibió hospitalariamente y le ofreció algo para beber. Cuando la diosa, estando demasiado abrumada por la pena, rehusó la bebida, Baubo hizo un gesto tan extraño que la diosa sonrió y aceptó el trago.
En varios momentos de la historia griega se representaban Figuritas llamadas «Baubos» se hallan en ciertos lugares normalmente con relaciones griegas. Producidas en masas, las había de varios estilos, si bien lo básico es que siempre exponen la vulva de alguna forma:

Una figura regordeta, con las piernas abiertas, haciendo un gesto hacia su vulva expuesta.
Una figura despatarrada sujetando un arpa a lomos de un verraco.
Un torso desnudo sin cabeza con la cara en el cuerpo y la vulva en el mentón de la cara.
Una figura sentada con una vulva exagerada llenando el espacio entre las piernas.
Las figuritas solían tener peinados elaborados y algunas sujetaban copas o arpas. Algunas tenían una anilla moldeada en la cabeza, lo que parece indicar que eran colgadas de alguna forma, posiblemente a modo de amuleto.

Robert Graves escribe que Deméter (disfrazada) era huésped del rey Céleo en Eleusis. La criada del rey, Yambe, «intentó consolar a Deméter con versos cómicamente lascivos, y una seca niñera, la vieja Baubo, la convenció para que bebiese agua de cebada en broma: gimió como si estuviese de parto e, inesperadamente, salió de bajo sus faldas el hijo de Deméter, Yaco, quien saltó a los brazos de su madre y la besó.» Graves escribe que «Yambe y Baubo personifican las canciones obscenas, en métrica yámbica, que se cantaban para aliviar la tensión emocional en los misterios eleusinos; pero Yambe, Deméter y Baubo forman la tríada de doncella, ninfa y vieja. Las viejas niñeras de los mitos griegos casi siempre representan a la diosa como anciana.»

Existe un extracto del libro
“Mujeres que corren con los lobos” de Clarissa Pinkola, que hace referencia sobre la diosa griega Baubo que se reproduce a continuación.

“Deméter, la madre tierra, tenía una hermosa hija llamada Perséfone que un día estaba jugando en un prado. De pronto, Perséfone tropezó con una preciosa flor y alargó las puntas de los dedos para acariciar su bella corola. Súbitamente el suelo empezó a estremecerse y un gigantesco zigzag rasgó la tierra. De las profundidades de la tierra surgió Hades, el dios de Ultratumba. Era alto y poderoso y permanecía de pie en un carro negro tirado por cuatro caballos de color espectral.

Hades agarró a Perséfone y la atrajo a su carro en medio de un revuelo de velos y sandalias. Después los caballos se precipitaron de nuevo al interior de la tierra. Los gritos de Perséfone son cada vez más débiles a medida que se iba cerrando la brecha de la tierra como si nada hubiera ocurrido.

Los gritos y el llanto de la doncella resonaron por todas las piedras de las montañas y subieron borbotando en un acuático lamento desde el fondo del mar. Deméter oyó gritar a las piedras. Oyó los gritos del agua. Después un pavoroso silencio cubrió toda la tierra mientras se aspiraba en el aire el perfume de las flores aplastadas.

Arrancándose la diadema que adornaba su inmortal cabello y desplegando los oscuros velos que le cubrían los hombros, Deméter voló sobre la tierra como un ave gigantesca, buscando y llamando a su hija.

Aquella noche una vieja bruja les comentó a sus hermanas junto a la entrada de su cueva que aquel día había oído tres gritos: uno era el de una voz juvenil lanzando alaridos de terror; otro, una quejumbrosa llamada; y el tercero, el llanto de una madre.

No hubo manera de encontrar a Perséfone y así inició Deméter la búsqueda de su amada hija a lo largo de vanos meses. Deméter estaba furiosa, lloraba, gritaba, preguntaba, buscaba en todos los parajes de la tierra por arriba, por abajo y por dentro, suplicaba compasión y pedía la muerte, pero, por mucho que se esforzara, no conseguía encontrar a su hija del alma.

Así pues, ella, la que lo hacía crecer todo eternamente, maldijo todas las tierras fértiles del mundo, gritando en su dolor: “¡Morid! ¡Morid! ¡Morid!” A causa de la maldición de Deméter ningún niño pudo nacer, no creció trigo para amasar el pan, no hubo flores para las fiestas ni ramas para los muertos. Todo estaba marchito y consumido en la tierra reseca y los secos pechos.

La propia Deméter ya no se bañaba. Sus túnicas estaban empapadas de barro y el cabello le colgaba en enmarañados mechones. A pesar del terrible dolor de su corazón, no se daba por vencida. Después de muchas preguntas, súplicas e incidentes que no habían dado el menor resultado, la diosa se desplomó junto a un pozo de una aldea donde nadie la conocía.

Mientras permanecía apoyada contra la fría piedra del pozo, apareció una mujer, más bien una especie de mujer, que se acercó a ella bailando, agitando las caderas como si estuviera en pleno acto sexual mientras sus pechos brincaban al compás de la danza. Al verla, Deméter no pudo por menos de esbozar una leve sonrisa.

La bailarina era francamente prodigiosa, pues no tenía cabeza, sus pezones eran sus ojos y su vulva era su boca. Con aquella deliciosa boca empezó a contarle a Deméter unas historias muy graciosas. Deméter sonrió, después se rió por lo bajo y, finalmente, estalló en una sonora carcajada. Ambas mujeres, Baubo, la pequeña diosa del vientre, y la poderosa diosa de la Madre Tierra Deméter se rieron juntas como locas.

Y aquella risa sacó a Deméter de su depresión y le infundió la energía necesaria para reanudar la búsqueda de su hija y, con la ayuda de Baubo, de la vieja bruja Hécate y del sol Helios, consiguió finalmente su objetivo. Perséfone fue devuelta a su madre. El mundo, la tierra y los vientres de las mujeres volvieron a crecer”.

Información del artista


Ver más información de Antonio Francesco Migliori Ceffalo

Contacta con el artista
  • FlechaCríticas (0)
Recomendaciones de Artelista
¿Deseas ver el precio en otra moneda?

¿Qué medidas de seguridad toma Artelista?

  • Perfiles de artistas verificados Artista verificado
  • Artelista recoge la obra en el taller del artista tras validar que todo está correcto y la lleva directamente a tu casa. Aseguramos la obra durante el envío con Allianz Seguros™
  • Una plataforma segura: El artista no recibe el dinero hasta que nos confirmas que todo está bien
  • Si al recibir el cuadro no te convence, pasamos a recogerlo gratis y te devolvemos el dinero
  • Obras con certificado de autenticidad
  • Atención telefónica

¿Cómo pago?

  • Los pagos se realizan por internet, a través del sistema seguro de Artelista. Haz clic en el botón "Añadir a la cesta" y selecciona la forma de pago que prefieras: Tarjeta de crédito/débito, PayPal o transferencia bancaria.
  • Gastos de envío cubiertos por Artelista
¡Mira todo lo que te ofrecemos!

No encuentras lo que buscas. En artelista te inspiramos

Contacta con el artista

Rellena el siguiente formulario para contactar con Artelista.

Es necesario validar que no eres un robot.

Hacer oferta por esta obra

Rellena el siguiente formulario para enviar tu propuesta al artista

$

Es necesario validar que no eres un robot.

Al enviar esta oferta significa que aceptas las Condiciones legales de Artelista
Métodos de pago
Devolución fácil y gratis

Devolución fácil y gratis


En el caso de que al recibir tu pedido cambies de opinión o simplemente no te convenza, dispones de un plazo de 14 días naturales sin coste de devolución para ti, a contar desde el día siguiente a la recepción del pedido, para cambiarlo o devolverlo.


Para hacer tu cambio o devolución sólo tienes que seguir estos pasos:

  • - Envíanos un email a customerservice@artelista.com y nuestro servicio de Atención al Cliente contactará contigo de 10 a 14h y de 16 a 18h (hora de España peninsular) de lunes a jueves y los viernes de 10 a 14h. Ten siempre a mano el número de pedido sobre el que quieres realizar tu consulta, será más fácil y rápido.
  • - La empresa transportista recogerá tú pedido en el lugar que nos indiques y cuando recibamos la obra te devolveremos el importe integro de tu compra.

Disfruta ahora de todo el arte en Artelista

Envío y devolución gratis

Envío gratis, rápido y seguro


En Artelista tienes a tu disposición obras de arte de artistas de todo el mundo, hasta 170 países diferentes, y no queremos que los gastos de envío te supongan un problema a la hora de disfrutar del mejor arte. El precio indicado en la obra es el precio final a pagar al final del proceso de compra, sin sorpresas. Además, para mayor tranquilidad, aseguramos las obras durante el envío con Allianz Seguros, por lo que en caso que la obra llegue dañada, nosotros nos encargaremos de gestionarlo todo.


El tiempo de entrega de las reproducciones es de 5 a 7 días laborales, mientras que el tiempo aproximado de entrega de obras originales varía en función del país de origen de la obra. Una vez el artista tiene la obra lista para el envío, tu pedido puede tardar entre 24 y 72 horas en ser entregado, pero estos tiempos pueden verse afectados por posibles gestiones en aduana si el país de origen se encuentra en un espacio común (UE, NAFTA, etc.) diferente al de tu país. Recuerda, fíjate bien en el origen de la obra antes de comprar, puedes consultar los posibles costes de importación aquí. Los envíos desde países como Argentina, Colombia o Cuba necesitan una autorización especial para la exportación, por lo que hay que tener en cuenta esto de cara al tiempo de entrega.


No hay que olvidar que se trata de obras de arte, por lo que pueden estar en una exposición. Normalmente, estas obras están marcadas como “no disponible” en la web, pero si está a la venta, tienes que tener en cuenta que el artista tiene que gestionar con la organización la devolución de la obra para poder preparar el envío de la misma.


Disfruta ahora de todo el arte en Artelista

Atención personalizada

Atención personalizada


Estamos trabajando con un producto único como lo son las obras de arte, y nuestra intención es que tú también lo sientas así, por lo que ofrecemos una atención personalizada y cercana. Estamos a tu disposición en todo momento. Si tienes cualquier inquietud sobre el artista, alguna pregunta sobre el estado de tu pedido o necesitas contactar con nosotros para informarnos de lo que sea.


Contacta con nosotros como prefieras:

  • - Envíanos un email a: customerservice@artelista.com
  • - Utiliza el chat que tienes disponible en la web

Disfruta ahora de todo el arte en Artelista

Información sobre reproducciones

En este momento no es posible realizar envíos de reproducciones fuera de España. Estamos trabajando para volver a ofrecer el servicio lo antes posible.

Disculpa las molestias