© Todos los derechos reservados
Óleo sobre arpillera
120 cm x 100 cm
Este óleo corresponde a una época en la que la reivindicación interior me llevada en volandas por caminos de una reflexión sobre la presencia y la ausencia, sobre el estar o el ser. Súplica se supone que es un ruego humilde, quise traspasar ese significado y hacer una súplica delirante, una súplica universal, una súplica con un cara a cara con aquel que se esconde sin dar la cara, un súplica para reclamar la dignidad humana.
Ver más información de Renata Ketten