Si hay una ciudad europea asociada al género de paisaje en pintura, esa es Venecia. La relación única que surge entre la luz, el aire, el agua y la piedra, y el hecho de que no haya un atardecer (ni un amanecer) idéntico a la orilla de la laguna, ha convertido a esta ciudad en parada obligatoria para miles de pintores paisajistas a lo largo de la historia. ¿La obsesión? Trasladar esa atmósfera mágica al lienzo. Behshad Arjomandi sabe mucho de atmósferas y entre sus cuadros más celebrados están algunos paisajes venecianos.

Romantic Venice, Behshad Arjomandi
Romantic Venice, Behshad Arjomandi

Dicen que no hay nada más romántico (y caro) que un paseo en góndola por el Gran Canal o la laguna. En Romantic Venice, Arjomandi trata de trasladar al lienzo la belleza única e irrepetible de un atardecer veneciano. Cientos de personas toman posiciones cada día en las terrazas para asistir a un espectáculo único, siempre fascinante, siempre diferente.

Venice Impression, Behshad Arjomandi
Venice Impression, Behshad Arjomandi

En Venice Impression, Arjomandi pone su caballete en uno de los puntos predilectos de los pintores (y los fotógrafos) de la ciudad italiana. Desde los Jardines Reales, al sur de la Plaza de San Marcos, con las góndolas en primer plano y  San Giorgio Maggiore como telón de fondo, se genera una de las estampas clásicas de la ciudad. Aquí, de nuevo, el pintor español se concentra en la atmósfera, en la pesadez de ese aire veneciano que limpia, pero también agota.

Finalmente, en Venice o Venice II, Arjomandi toma posiciones en otro clásico de la ciudad para mostrar al espectador la belleza del Gran Canal abriéndose a la laguna. Y si todavía tenemos nostalgia veneciana, qué mejor que un cuadro como Memories of Venice.

Venice, Behshad Arjomandi
Venice, Behshad Arjomandi

Por supuesto, Behshad Arjomandi es mucho más que un pintor de paisajes venecianos, incluso que un pintor de paisajes, aunque sea este género uno de sus predilectos y el que más éxito le ha dado en su larga trayectoria. Porque Behshad ya ha perdido la cuenta de la cantidad de premios que ha recibido. Por algo será.

Licenciado en Bellas Artes por la Facultad de Barcelona, combina su trabajo de taller con sus salidas a pintar al aire libre. Entre ellas, Behshad se ha abonado a los concursos de pintura rápida, en los cuáles suele ser uno de los “rivales más temidos”. La pintura rápida no solo es una fuente de ingresos extra, sino que también es una forma de ponerse a prueba, un reto artístico compartido con otros colegas y una forma de obligarse a trabajar au plein air.

Atardecer en Madrid II, Behshad Arjomandi
Atardecer en Madrid II, Behshad Arjomandi

Para un paisajista como Arjomandi, la pintura rápida no deja de ser otro medio para llegar al mismo fin: plasmar en el lienzo la luz cambiante, la atmósfera y el sentimiento único que despierta un motivo. Nunca será lo mismo sentarse a observar una calle que plasmarla a través de una imagen o una fotografía.

Metrópolis, Behshad Arjomandi
Metrópolis, Behshad Arjomandi

A buen seguro que Arjomandi aprovecha muchos de estos viajes de trabajo para dar forma a algunas de sus obras. A Magical Night in Cuenca hechiza como sus paisajes venecianos, lo mismo que sucede en Alhambra: Behshad se sube al Mirador de San Nicolás para plasmar una de las estampas más famosos de toda la geografía española.

Alhambra, Behshad Arjomandi
Alhambra, Behshad Arjomandi

Pero el pintor residente en Madrid también tiene tiempo para su ciudad. En lienzos como Metrópolis o La Puerta de Alcalá, Arjomandi nos muestra su talento para el dibujo, mientras que en Calle de Alcalá o Atardecer en Madrid II, el pintor opta por su estilo clásico, más impresionista, más atmosférico.

Calle Alcalá, Behshad Arjomandi
Calle Alcalá, Behshad Arjomandi

Decíamos que Behshad Arjomandi no es solo un paisajista y para muestra su serie de cuadros simbólicos como Lovers, Dreaming o Moonlight. Manteniendo la técnica vaporosa de sus paisajes, en estos cuadros se propaga, no obstante, un rumor alegórico, un amor que va más allá del tiempo, que se derrama fuera de la superficie del cuadro.

Moonlight, Behshad Arjomandi
Moonlight, Behshad Arjomandi

Finalmente, la producción de Arjomandi se completa con algunas aportaciones abstractas en las que el pintor residente en Madrid se concentra únicamente en las armonías cromáticas. Si Abstract Seascape VIII o Abstract Seascape X relaja nuestro pulso tal y como hacían los campos de color de Rothko, en Spring Symponhy aceleramos como en una centelleante tarde primaveral.

Te invitamos a visitar la galería de Behshad Arjomandi en Artelista.

Spring Symphony, Behshad Arjomandi
Spring Symphony, Behshad Arjomandi