Gisela Gaffoglio nació en Buenos Aires en 1966 y desde chica se vinculó con el mundo del arte en sus diversas manifestaciones. Su formación artística devino espontáneamente con la primera guía de Marcos Aquistapace, continuando luego su formación con Duilio Pierri, Maggie de Koenisberg y Ariel Mlynarzewicz. Su prolífica obra cuenta con un estilo propio y original donde la expresión, el movimiento y el color son protagonistas.

Gisela Gaffoglio

¿Cuándo y por qué empezaste a pintar?

Siempre amé la pintura y provengo de una familia en donde se valoraban mucho todas las manifestaciones artísticas. Pero fue mi hija quien me empujó a tomar clases de pintura con ella. Recuerdo que cuando fondeé mi primera tela de bermellón, sentí una alegría inmensa.

¿Cómo crees que deben ayudarse una galería y sus artistas?

Creando una relación de confianza, cercanía e intercambio. Cada uno tiene que saber ponerse en el lugar del otro. El artista tiene que ser responsable y respetuoso de las formas y la galería ser más flexible y tratar de facilitarle las cosas a los artistas.

¿Qué consejo darías a aquellos artistas que empiezan a mostrar su obra?

Que cuiden mucho como se presenta la misma. Si es en una ambiente físico, que cuiden la luz y el entorno principalmente. Para el ámbito digital, la calidad de las fotos. Veo fotos que ni siquiera se recortan y eso realmente desmerece la obra.

¿Cómo vendiste tu primera obra? ¿Hay alguna con la que sientas una mayor conexión?

Mi primer obra se la vendí a una vecina que enseguida me compró dos obras más. La iniciativa provino de ella y fue toda una sorpresa para mí. Me gusta mucho una obra mía de mi última muestra: Perfumes, la obra se llama La mirada de los otros.

La mirada de los otros, Gisela Gaffoglio

La mirada de los otros, Gisela Gaffoglio

¿Qué es el arte para ti? ¿Qué papel juega en tu vida? ¿Vives del arte?

El arte para mi es mi manera de entenderme y buscar mi rumbo. Es también un camino de evolución. Si bien también soy abogada especialista en propiedad intelectual, hoy mi ingreso principal proviene del arte.

Últimamente hemos visto un cambio de estilo en tu obra; has pasado de la figuración, mayormente femenina, a la abstracción, ¿a qué se debe?

A una necesidad de dejarme fluir al momento de pintar, no tener condicionamientos y disfrutar del proceso. También a descifrar un poco mi vida. Cada obra es como un gran sueño, o una representación teatral. Se encuentran un montón de símbolos que reflejan mis sentimientos, miedos y anhelos.

¿Cuáles son tus fuentes de inspiración? ¿Te sientes identificada con algún otro artista?

Me influyó muchísimo Klimt por su poesía, Van Gogh por su fuerza, Schiele por su erotismo y Mlynarzewich por su gestualidad.

En tu proceso creativo, ¿tienes alguna costumbre, práctica o manía que puedas compartir con nosotros?

Me encanta pintar afuera si puedo. Disfruto mucho del contacto con la naturaleza. También me pongo cualquier cosa. Hasta he usado un uniforme de empleada domestica viejo que encontré.

¿Has realizado alguna exposición últimamente, qué puedes contarnos? ¿Tienes algún proyecto en mente?

Acabo de cerrar una muestra muy importante en el Centro Cultural Borges (Buenos Aires), donde las obras eran todas de gran formato. Por suerte la misma tuvo una excelente acogida por parte del  público y artistas. Ahora estoy viajando por Italia y Grecia en busca de sensaciones y estímulos para plasmar en mi nueva obra. Tengo la idea de integrar mi nueva muestra con una performance pero sin que la pintura pierda su papel protagónico.

Podrías recomendarnos:

  • Un artista: Monet.
  • Una obra: Las tres edades de la mujer de Klimt.
  • Un libro: La insoportable levedad del ser de Milan Kundera.
  • Una película: La lección de piano.

Muchas gracias Gisela.

La naturaleza es una mujer, Gisela Gaffoglio

La naturaleza es una mujer, Gisela Gaffoglio