Me he formado a mí mismo siendo autodidacta, aunque a los diecisiete años entré en la escuela de Bellas Artes, donde aprendí… a limpiar los pinceles. Soy pintor y profesor de dibujo y pintura, aunque para llegar hasta aquí he tenido que ejercer diferentes profesiones para sobrevivir. He sido rotulista, músico, recepcionista y hasta director de hotel, pero nunca he abandonado la pintura pues era necesario para mi dibujar o pintar cada día o cada noche. Durante esos años he pintado muchas acuarelas, y muchos retratos a pastel, por encargo. Mis grandes aficiones son, además de la pintura, la música (he sido cantante y guitarrista de rock) y la literatura (he publicado algún libro además de relatos y poemas varios en diferentes revistas).

Poemas que nunca podrás leer, Daniel Martín Cea.

Poemas que nunca podrás leer, Daniel Martín Cea.

¿Cuándo y por qué empezaste a pintar?
Cuando tenía cinco años, fui a pasar dos meses de verano con mi tía a Madrid. Ella, al ver como pasaba los días pintando en un cuaderno con mis lapiceros, me compró un pequeño lienzo, un par de pinceles y unos tubos de óleo. Entonces descubrí los colores de verdad y desde entonces nunca he dejado de pintar a diario. Mi madre siempre me dijo que yo nací con un pincel bajo el brazo.

¿Cómo crees que deben ayudarse una galería y sus artistas?
La tarea de una galería es dar a conocer las obras de los artistas e intentar comercializarlas por los mejores cauces y, a la vez, los artistas deben ofrecer a la galería lo mejor de sí mismos.

¿Qué consejo darías a aquellos artistas que empiezan a mostrar su obra?
Que no tengan miedo a mostrar su obra y que no se preocupen si no venden o si tienen malas críticas. Vivir del arte es difícil, pero si son verdaderos artistas, la gente, que no los políticos ni las modas, sabrá reconocerlos. No deben jamás regalar sus obras. Ningún profesional regala su trabajo. Ellos tienen un don que otros no tienen. Como digo a mis alumnos más jóvenes: “Cuadro regalado, ni querido ni pagado”.

Stairway to Heaven, Daniel Martín Cea

Stairway to Heaven, Daniel Martín Cea.

¿Cómo vendiste tu primera obra? ¿Hay alguna con la que sientas una mayor conexión?
Mi primer cuadro lo vendió mi madre a una amiga suya, cuando yo tenía once años. Luego vinieron varios encargos más de otras de sus amigas. Me ayudaron a pagar mis lienzos y mis pinturas, y a formarme a mí mismo aprendiendo de mis errores. Todos mis trabajos son hijos míos, pero si hay un cuadro a destacar es Stairway to heaven (escalera al cielo) que pinté meses después de la muerte de mi hijo Alberto, que murió a los veinte años. Ese cuadro fue un desgarro de mi alma. Precisamente voy a publicar un libro pronto con ese título en el que incluiré unas 75-80 obras mías, además de relatos, poemas, etc.

¿Qué es el arte para ti? ¿Qué papel juega en tu vida? ¿Vives del arte?
El arte para mí es la vida misma. Nadie debería de vivir sin arte en su vida. Para un pintor y enseñante de pintores lo es todo. A mis alumnos les hablo de pintores, de cuadros famosos, de dificultades, de alegría, del alma ante una obra bien hecha, de cómo conseguir lo imposible con el arte. Vivo del arte y para el arte.

Ella amaba a Caravaggio, Daniel Martín Cea

Ella amaba a Caravaggio, Daniel Martín Cea.

¿Cuáles son tus fuentes de inspiración? ¿Te identificas con algún otro artista?
La naturaleza es mi fuente de inspiración, y mi mujer y mis hijos a los que reproduzco con frecuencia en mis cuadros. Me identifico con los pintores del romanticismo francés, con los prerrafaelistas, con Caspar David Friedrich y con el movimiento actual de pintores realistas, aunque a muchos de estos les critico el pintar solo uno o dos temas parecidos en sus cuadros y repetir el mismo tema una y otra vez. No me gusta el pintor monotemático. Como decía Leonardo, “el pintor debe ser universal, debe saber pintar todo tipo de temas…”.

¿Qué tiene tu proceso creativo que lo haga especial?
Me gustan las luces especiales del paisaje, cuando encuentras ese momento mágico del día y lo retienes en la memoria para, posteriormente, partiendo de una luz normal, cambiar lo que has visto y ponerle esa luz particular que tenía ese momento. Por eso me suelen decir que mis cuadros tienen una luz “muy trabajada”.

En la playa, Daniel Martín Cea.

En la playa, Daniel Martín Cea.

También me gustan las figuras solas formando parte del paisaje, como debería de estar el ser humano, integrado como una parte más de la naturaleza. Me gusta trabajar solo, rodeado de música a todo volumen. La música es el complemento que necesito para transportarme a mi universo.

¿Has realizado alguna exposición últimamente, qué puedes contarnos? ¿Tienes algún proyecto en mente?
He estado en colectivas en París, Edimburgo, Madrid, etc. Pendiente tengo una en Valladolid y otra con las obras de mis alumnos.

Podrías recomendarnos:
No puedo quedarme con una obra, con un artista, con un libro… hay mucho que me gusta, pero si me pides que escoja:
Un artista: John Everett Millais, Ingres, Sorolla, Caspar D. Friedrich, etc.
Una obra: Ofelia de J. E. Millais.
Un libro: Libro del desasosiego de Fernando Pessoa.
Una película: Alien: el octavo pasajero.

Muchas gracias. 

Te invitamos a visitar la galería de Daniel Martín Cea en Artelista y una crítica de su obra.

El gato y la mariposa, Daniel Martín Cea.

El gato y la mariposa, Daniel Martín Cea.

 

Hundida, Daniel Martín Cea.

Hundida, Daniel Martín Cea.