En el trabajo de Bornot se acentúa una marcada voluntad decorativa, materializada a través de recursos generadores de un contenido visual placentero. Pretendiendo, en cada movimiento, la obtención de una expresión cautivadora.

Antonio Pérez Bornot (Santiago de Cuba, 1964) encuentra las formas para producir esa belleza en la naturaleza y en la mujer. En la colorida y exótica vegetación de parajes cubanos y en las tentadoras siluetas de elegantes modelos. Féminas esquemáticas irradiadoras de una vistosa sensualidad nacida del contoneo de los planos y ángulos que las proyectan. Y que, cuando le conviene, el pintor hace emerger de sugerentes manchas teñidas con flores.

Entre flores. Antonio Pérez Bornot

Entre flores. Antonio Pérez Bornot

Para la consecución de esta estética se vale del dibujo, de trazo muy expresivo y preciso. Sorprendiendo con líneas distorsionadas, aunque fácilmente identificables, dentro de espacios ausentes de perspectiva, que dejan una atrayente y espontánea armonía.

Antonio Perez Bornot

Dama con flores, Antonio Perez Bornot

Bornot logra esta melodía visual mediante la disposición que hace de la luz, ejecutando una atmósfera lumínica intensa, en ocasiones, uniforme. Equilibrio fortalecido, además, por el contraste entre colores fríos y cálidos. Con el que alcanza una implicación mayor al emplear una rica gama cromática de colores muy saturados. De los que se distingue el rojo como una referencia particular en su obra, junto con el detalle del sombrero como capricho.

Retrato en el jardín. Antonio Pérez Bornot

Retrato en el jardín. Antonio Pérez Bornot

Durante más de dos décadas se ha dedicado profesionalmente a la pintura, desarrollando un estilo propio. Y, guiado por una formación autodidacta, ha trabajado con libertad creativa, permitiéndose experimentar técnicas, soportes e influencias dispares bajo su objetivo artístico.

Encuentro. Antonio Pérez Bornot

Encuentro. Antonio Pérez Bornot

Como el gusto decorativo de Gustav Klimt o los efectos lumínicos del impresionismo, practicando la pincelada puntillista de Georges Seurat. Aún más, revelando en sus lienzos los elementos compositivos y los matices cromáticos más característicos de Pablo Picasso.

La obra de Antonio Pérez Bornot ha sido reconocida tanto a nivel nacional como internacional. Sus creaciones forman parte de colecciones privadas en España, Nicaragua, México y Estado Unidos.

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